martes, octubre 19, 2004

Historias (de la SGAE) para no dormir

Un anónimo (ejém, vale que su historia particular no tenga credibilidad, pero las verdades que dice son como puños) nos habla en AristasWeb sobre su negocio y la SGAE:


"El dueño del bar compra un disco. Lo paga. Pero no puede escucharlo si hay gente en el bar. Sólo si está él solo.
-Vaya lío.
-¡Ah! Que tiene que pagar si hay más gente.
- Sólo si va a ganar dinero con el disco.
- Pero el que le vendió la cafetera no viene cada mes a reclamarle nada aunque esté ganando dinero con ella."


"Los derechos de autor se crearon para que nadie pudiera hacer como suya, una canción de otra persona, pero de ahí a lo que es ahora va un abismo. "

Y lo que es ahora no es otra cosa que un derecho de pernada. Un fuero medieval del que algún día, espero, podremos desprendernos.

Ayer mismo fui de compras con una amiga y en todas las tiendas sonaba música. Estuve a punto de preguntarles si pagaban la minuta a los ladrones (curioso que soy) pero ya imaginaba la respuesta: "ay, pues no se, yo sólo soy la dependienta" ;)

No hay comentarios: